jueves, abril 27, 2006

Celos y certidumbres

david chávez

I CELOS

Ahí está otra vez, acostada en la cama, con la mirada fija en el techo, deteniéndolo, pensativa. ¿Qué chingados hace, en qué carajos piensa, qué la tiene en las nubes? Otra vez a hacerle la misma pregunta de hace unos días:
--¿De nuevo haciendo castillos en el aire, querida?
--Fortalezas, mi amor, fortalezas... y con su príncipe azul adentro.
“Así que fortalezas”, pienso. “Así que principitos de colores”... hoy tengo otra respuesta adecuada para este tipo de situaciones: echaré a volar mi imaginación, como hace ella: le demostraré que además de matar seres mitológicos y héroes de leyendas también sé aniquilar ilusiones femeninas.


II … Y CERTIDUMBRES


De entre las cartas que ella puso sobre la mesa estaba esta, escrita con primorosa letra de niña educada en colegio de monjas: “El jueves destruiste mis sueños, el viernes mataste a los más valerosos de mis héroes; en un descuido, este sábado penetraste a los castillos que con ilusión construí en el aire y el domingo pasaste por encima de las amuralladas fortalezas en donde se resguardaba de tus celos mitológicos mi príncipe azul. No puedo más, siento que me asfixias. Decidí seguir con tu juego, así que lo confieso: te engaño con el pensamiento. No nos busques, no regresaremos. Para cuando leas esto él y yo podríamos estar... no sé: algo me dice que el País de las Maravillas es taaan extenso…”.

2 comentarios:

Letisha Carlop dijo...

muy bueno, es de esos que hasta a las feminas nos ponen a pensar...por eso yo siempre dije, para que Artagnan si Athos es mejor...jajajajaja...desde la montaña...

deivid dijo...

saludos desde el País de la Maravillas (las galletas maravillas)!!!